El té verde es una de las infusiones más populares a nivel mundial. De hecho, es la segunda bebida más consumida después del agua. En los países orientales es sinónimo de salud desde hace varios siglos. El efecto del té verde se relaciona, incluso, con una menor incidencia de enfermedades como el cáncer en esas latitudes.
Debido a sus múltiples beneficios para el organismo, en Occidente su consumo no deja de aumentar, aunque también es cierto que no todo lo que dicen está debidamente contrastado. Por eso, en este artículo, queremos hablaros de cuáles son las verdaderas propiedades del té verde.
Las propiedades del té verde según la ciencia
Si bien existen muchos mitos sobre las cualidades del té verde, gracias a las investigaciones científicas conocemos sus auténticas propiedades medicinales. Una de las principales es que posee entre dos y tres veces más antioxidantes que otras frutas y verduras. Esto aporta beneficios como los siguientes:
- Ayuda aprevenir y a combatir eficazmente las infecciones
Un estudio del año 2018 demostró que uno de los antioxidantes más importantes del té verde, las catequinas, tienen la capacidad de prevenir y erradicar infecciones. Esta sustancia puede actuar contra organismos microbióticos multiresistentes.
- Ha probado ser anti-cancerígeno
La catequina EGCC tiene un efecto positivo en la lucha contra las células cancerígenas, limitando su reproducción y su expansión por el organismo. Asimismo, ayuda al sistema inmunológico, manteniendo sus defensas fuertes.
Las catequinas han sido efectivas para inhibir la metástasis en pacientes con cáncer de próstata y para bloquear el crecimiento de melanomas de pulmón en experimentos con ratas de laboratorio.
- Es útil para combatir el exceso de glucosa
El efecto beneficioso del té verde para mitigar la diabetes tipo 2 también ha sido comprobado. El poderoso efecto antioxidante de la catequina EGCC ayuda a controlar la cantidad de azúcar en sangre, especialmente durante episodios de hiperglucemia. Adicionalmente, induce la secreción de insulina, el mecanismo natural del organismo para controlar los excesos de glucosa.
- Mejora la salud cardiovascular
Una taza de té verde al día reduce hasta en un 10% la posibilidad de padecer una enfermedad coronaria. Sus antioxidantes protegen el sistema circulatorio, al disminuir el estrés sobre la capa interna de los vasos sanguíneos. Además, mantienen a raya la acumulación de colesterol en las venas. Por otro lado disminuye la presión arterial, ya que contiene cafeína.
- Efectos positivos para el cerebro y los huesos
Por sus bondades el té verde es también un aliado de las personas mayores. Su consumo está relacionado con una menor progresión de enfermedades neurodegenerativas como el Alzheimer, el Parkinson y la demencia. Los antioxidantes actúan contra el estrés oxidativo, el principal factor del deterioro de las neuronas.
De igual manera, según se publicó en la revista Journal of Agricultural and Food Chemistry,
la epigalocatequina del té verde incrementa en un 80% el desarrollo de osteoblastos, las células de los huesos. Esto resulta en una estructura ósea más resistente a enfermedades como la osteoporosis.